Gonzalo Hervás
«Be water my friend»
¿Cómo reaccionas cuando la vida se pone cuesta arriba?
De eso nos habló el psicólogo Gonzalo Hervás, el pasado jueves 19 de octubre, en el colegio mayor Santillana, dentro del ciclo de sesiones de nuestro programa Héroe® de excelencia personal.
Pues la respuesta no puede ser más simple (y a la vez más compleja): con estrés y ansiedad.
Y es que la mayoría de las personas llevamos muy mal tener varios frentes abiertos. Nuestro organismo compara nuestras capacidades con lo que la vida nos exige: cuando las demandas están por encima de las capacidades se activa el estrés (mal asunto), pero si ocurre al revés se produce la desmotivación (no se yo qué es peor) y en el medio está el tan complicado de encontrar «equilibrio».
Estudiar una carrera, preparar una oposición o comenzar un nuevo trabajo son situaciones que nos tensionan y nos pueden provocar este desequilibrio. Y, ante esto, ¿qué podemos hacer? Gonzalo nos invitó a intentar dar la vuelta a las situaciones, viéndolas como oportunidades en lugar de amenazas. Esto es muy fácil decirlo en un par de líneas, pero requiere mucho enfoque y trabajo interior para llevar a cabo este cambio de mentalidad.
El segundo tema clave del que nos habló fue la ansiedad y cómo todos cometemos los mismos errores: lo primero que uno intenta hacer ante la ansiedad es intentar controlarla y esto, lejos de solucionar el problema, hace que la situación se agrave.
Entonces, ¿qué hacemos? Nuevamente la solución es mucho más fácil de decir que de llevarla a la práctica: mantener la cabeza fría y no hacer nada. Y es que, aunque parezca mentira, la ansiedad no te puede matar, no te puede hacer nada malo, solo es una sensación ficticia que genera tu cuerpo.
Y es que tu organismo lo que hace es alertarte para que seas consciente de que algo no va bien, por eso el ataque de ansiedad suele aparecer en momentos de tranquilidad; en dicho estado es cuando se produce una activación desproporcionada para que te asustes y reacciones ante una acumulación de emociones. Y es que este es el verdadero problema de la mayoría de nosotros, nos llenamos de emociones que no gestionamos, nos las tragamos, cuando lo que tenemos que hacer es sacarlas hacia afuera (hablarlas, escribirlas, contarlas…).
Gonzalo nos habló de la importancia de ser resilientes, poder doblarse sin romperse, saber encajar el dolor y salir fortalecido del proceso, y nos invitó a entender el sufrimiento en una mala época como algo normal que debemos aceptar, igual que debemos aceptar que no durará para siempre, sino que pasará y, si lo gestionamos bien, saldremos fortalecidos y con grandes aprendizajes.
Debemos actuar proactivamente en esta gestión emocional, ya que el ser humano está diseñado para prevenir amenazas y esa es la causa del agobio que nos supone un futuro incierto, aunque sea muy improbable que ocurra todo lo que imaginamos.
Si lo hacemos, a base de trabajo, podremos llegar a detectar cuándo nuestro sistema emocional falla y ser conscientes de que nuestras emociones nos están traicionando.
Igual de importante es contar nuestras emociones como ponernos en el otro lado y escuchar a quien lo necesita y, por supuesto, nos enseñó a hacerlo: la clave consiste en decir muy poco, controlar las ganas de hablar y acompañar, con gestos, mirada… para que la otra persona sienta que la escuchas, que estás pendiente. Si a esto le sumas hacer las preguntas adecuadas, la otra persona acabará contándote cosas que ni él mismo sabía, por lo que le ayudarás a, incluso, conocerse un poco más.
Gonzalo nos aportó un enfoque positivo de cómo la sociedad está comenzando a normalizar que las personas hablen de sus problemas y de cómo los han superado, y nos dejó claro que para que tengas una vida plena debes aprender a disfrutar con tu trabajo. Y es que el ser humano tiene una necesidad de sentirse competente, hacer cosas y hacerlas bien.
Y en este momento estarás pensando…
«Si me tocase la primitiva, no volvería a trabajar en mi vida».
Lamento decirte que queda muy bien para soñarlo, pero que realmente no serías capaz de vivir así; tenemos una vida tan llena de retos y actividades que necesitamos continuamente tener cosas que hacer.
Te lo voy a preguntar de otra manera:
¿Cuánto aguantarías en una isla sin nada que hacer todo el día, nada más que levantarte, comer y descansar? (Yo seguro que no llego a una semana).
Gonzalo, muchas gracias por hacernos ver lo bonita que es la vida, con sus retos, desafíos y oportunidades. Muchas gracias, también, por enseñarnos que las emociones hay que gestionarlas y que es normal sentir estrés y ansiedad, pero que debemos hacer caso a las señales porque, solo de esa manera, podremos llegar a ser los Héroes® de nuestra existencia y tener una vida… LEGENDARIA.
Héctor Trinidad
Colegio Mayor Santillana
@HectorTrinidadQ
Gonzalo Hervás
«Be water my friend»
Psicólogo clínico
19 de octubre de 2023
Sesión a las 21 h
COLEGIO MAYOR SANTILLANA
C/MARBELLA 60, 28034, MADRID
Programa de excelencia personal HÉROE ®